Testimonio

Mi nombre es lo de menos , lo importante es la historia. , a través de un amigo me animó y contó la aparición de la Virgen, Nuestra Señora del Carmen, nuestra Madre, tomé el tren y fuí un día a finales de Mayo a pueblecito, entre montañas donde quedo mi corazón, y firmé mi conversión, espero definitiva, y por supuesto mi amor a Jesús y María ,como no a la Santisima Trinidad.

Estando en la posada de Amalia le pedí el Crucifijo, que su (hermana Mari Loli,que en paz descanse), dió a besar a la Virgen, estando en la habitación con el crucifijo en mi cama, tendido, caí en la cuenta , que quizás podría haber comulgado en pecado mortal,deseperación , angustia, estando en esa situacíón,me incorporé y… oi» pero qué necesitas?, que es lo que quieres?, era una voz suave, amorosa, firme pero dócil, miré ,a lo largo de la habitación, miré al Cristo, intuí sin hacer caso parte racional,que la voz que (oí ,no con oidos, ni mente , hoy creo firmemente que fue en el corazón),provenia del Cristo, entonces sentí paz , sosiego mental y corporal ,desapareció mi mangustia,sentí esa felicidad, que me duró hasta una semana después de regresar a casa.

Esta es mi humilde y sencilla experiencia, mi corazón se estremece , una lagrima asoma , y una gran turbación de todo mi ser sacude , cada vez que lo recuerdo. Posteriormente fuí a Medjugorje donde también rafirme mi fe, pero esa es otra historia.
Abrazo a todos , Padre Rolando, Amalia Y a Manolo que se recupere de su enfermedad,y a ustedes que Nuestra Madre del Cielo les bendiga , en la abvocación del Carmen, y como no bajo la Reina de la Paz.